Autor | Jaime RamosLa producción y la gestión energética de una ciudad es una de las asignaturas más relevantes para la sostenibilidad. Podemos afirmar que el desarrollo industrial de siglos pasados no se fraguó sobre una base firme de eficiencia energética. Es ahora cuando surgen los dilemas sobre cómo seremos capaces de responder a una demanda energética urbana que no deja de crecer.Los edificios de cualquier ciudad, su seña de identidad más material e icónica, se comen de forma literal la energía urbana. En la Unión Europea el 40% del consumo energético (y el 36% de las emisiones de dióxido de carbono) provienen de los servicios básicos de calefacción, refrigeración y agua caliente de los edificios. Por eso, el sector de la energía no ha dejado de buscar alternativas para aliviar el consumo con edificios y fuentes de energía más inteligentes.
¿Qué es la geotermia?

Energía geotérmica significa energía almacenada en forma de calor bajo la superficie de la tierra sólida.Se trata de aprovechar los flujos de calor existentes en el interior de la corteza terrestre. Existen tres sistemas: mediante yacimientos de agua caliente, yacimientos secos o, incluso, géiseres. Dependiendo del lugar, se puede obtener una mayor o menor cantidad de energía. La geología que ofrecen países como Islandia, Italia o Nueva Zelanda los hace idóneos para levantar plantas geotérmicas.
La calefacción más natural
Ahora bien, no todas las regiones del mundo poseen un terreno ideal. Esto significa que la cantidad de energía que puede obtenerse del suelo no sería suficiente como para ofrecer precios competitivos en el mercado. Sin embargo, la geotermia guarda un as bajo la tierra. No tiene por qué aprovecharse para la producción energética a gran escala, sino que existen técnicas para aplicarla "tan solo" a calentar los edificios.No es necesario para ello contar con un yacimiento propio de regiones volcánicas. La denominada energía geotérmica de baja entalpía puede localizarse en multitud de áreas a una profundidad de unos 500 metros. Los sistemas de ciclo binario que permiten aprovechar esa energía nos ahorrarían hasta un 70% la factura, no solo de los sistemas de calefacción, sino también de refrigeración. Hasta la fecha, en Estados Unidos encontramos hasta 18 sistemas urbanos fundamentados en la geotermia.Un desafío complicado, pero con muchos beneficios
