Autora | Lucía Burbano
Las estrategias innovadoras y la adopción de tecnologías punteras que caracterizan a las ciudades inteligentes no solo desempeñan un papel fundamental en su bienestar económico, sino que las posicionan entre las urbes con mayor diversidad de recursos y una eficiencia en la gestión que se traduce también en un mayor ahorro. El modelo de ciudad inteligente demuestra ser un motor económico, tal y como muestran los ejemplos presentados a continuación.
Tecnologias smart, aliadas de la economía
La integración de las economías digitales en las ciudades inteligentes está transformando radicalmente la gobernanza urbana y la prestación de servicios. Tecnologías clave como la Inteligencia Artificial (IA), el Internet de las Cosas (IdC) y el blockchain desempeñan un papel crucial en el impulso del crecimiento económico, la sostenibilidad y la eficiencia de las urbes.
Tecnologías disruptoras como la IA permiten a las ciudades inteligentes cribar y utilizar datos en tiempo real para optimizar la capacidad de respuesta y reducir los costes operativos. Por otro lado, las plataformas digitales, como el comercio electrónico y las fintech, crean nuevas oportunidades de negocio, estimulan las economías locales y generan empleo.
La innovación, el espíritu emprendedor y las asociaciones estratégicas, incentivan las economías urbanas hacia una prosperidad que atrae inversiones, impulsa la creación de empleo y alimenta el crecimiento sostenible.
Discusiones académicas recientes destacan el vínculo entre el emprendimiento y el desarrollo económico de las ciudades inteligentes. Si se les proporciona un entorno propicio, los emprendedores digitales son contribuyentes clave en áreas como la economía, tecnología, infraestructura, medio ambiente, movilidad o gobernanza.
Ciudades inteligentes también en economía

Singapur
La iniciativa Smart Nation de Singapur ilustra el potencial transformador de integrar las economías digitales en los ecosistemas urbanos. Innovaciones fintech como GrabPay y PayNow han procesado más de 10.000 millones de dólares en transacciones sin efectivo al año, contribuyendo a una economía digital que ahora representa el 22% del PIB.
Barcelona
Barcelona Impulsa, el plan estratégico de la ciudad, que cuenta con una inversión de 890 millones de euros entre 2024 y 2027, busca reforzar la economía local a través de la innovación y la tecnología.
Se espera que este plan genere 180.000 empleos y la apuesta es convertir a Barcelona en un centro de innovación tecnológica, un sector que genera importantes ingresos y puestos de trabajo en la región.
Tallin
El programa e-Residency de Tallin ejemplifica cómo las economías digitales pueden atraer a emprendedores globales a la vez que mejoran los ingresos nacionales. La iniciativa ha registrado a más de 100.000 e-residentes que, en conjunto, han fundado 25.000 empresas, generando 41 millones de euros en ingresos para Estonia. Los sistemas de gobernanza digital, como la declaración de impuestos en línea y los historiales médicos electrónicos, han ahorrado a Estonia 500 millones de euros anuales.
Kigali
La economía digital de Kigali ha crecido un 13% anual. Parte de este crecimiento se debe a las empresas emergentes en tecnología financiera y comercio electrónico, que han atraído más de 100 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa a Ruanda. En el primer trimestre de 2025, el sector de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) ha sido el segundo mayor contribuyente al crecimiento del PIB del país.
Espoo
Tras el declive del negocio de telefonía móvil de Nokia, Espoo pasó de ser una ciudad dependiente de un único gigante tecnológico a un centro de startups e innovación digital. Actualmente, hay más de 1.500 empresas de alta tecnología en Espoo, con un ecosistema de startups valorado en 3.800 millones de euros. Cada año nacen en Espoo aproximadamente 100 startups.
El 42% de la facturación de las empresas de la Bolsa de Helsinki se concentra en esta ciudad finlandesa, que además ocupa el sexto lugar en solicitudes de patentes en Europa.
Fotografías: Unsplash/Andre Taissin, Unsplash/Denys Nevozhai


